Mostrando entradas con la etiqueta Cantarrania. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Cantarrania. Mostrar todas las entradas

Avy Lee Roth

Avy Lee Roth es hija del cantante de Van Halen, David lee Roth. O al menos eso dice ella.

Obviamente es mentira. Avy Lee Roth ha sido una de las grandes divas del cine porno hecho en Los Ángeles. Cuentan las crónicas que es la hispana que más ha triunfado en el cine porno mundial.

En realidad es de Almendralejo, ciudad en la que nació el 1 de diciembre de 1979. Su nombre real es Purificación Navia.

Salió de Extremadura hacia el año 2000. Viajó por España y en Madrid trabajó en discotecas de gogó y relaciones públicas. Una noche la descubrió el productor Mario Vaquerizo, conocido por ser el marido de la cantante pop Alaska.

Por aquel entonces no era ya Purificación Navia, era Candy Love. Montó un grupo que teloneó a Fangoria. El grupo se llamaba Cálmate Candy.

En España participó en una película de contenido pornográfico. En 2003 decide irse a Estados Unidos. Un año después se instala en la polémica afirmando en televisión que es hija del cantante de Van Halen. Y nace la leyenda de Avy Lee Roth. Se convierte en una musa del cine porno mundial. Amante del esoterismo, fan a rabiar de Jim Morrison y de los grupos de rock.

Se casa con el cantante del grupo Crankshaft. En noviembre de 2005 anuncia su abandono de la industria del porno.

Cristina Martínez

Cristina Martínez pertenece al grupo de esas mujeres extremeñas (extensible al alma alentejana) que poseen el gen de la aventura, de la incertidumbre, de la inquietud, del dolor, de la seducción.

Como ya lo hicieron, en otros momentos de nuestra historia y razones bien diferentes, Juanita Smith, Elvira Quintana o la propia Florbela Espanca, Cristina Martínez abandonó su paisaje fundacional para emprender un viaje en el tiempo, en las formas y en los espacios.

Aún hay quien la recuerda en Campanario, en el horizonte inmenso de La Serena. Hermosa, hermosísima como la montijana Elvira Quintana o la también bellísima Florbela.

A mediados de los años 80 del pasado siglo nos la encontramos en Washington D.C. Aquí empieza la leyenda. Cuentan las crónicas que en 1985, durante un concierto de la banda Jesus & Mary Chain, conoce a un tal Jon Spencer.

Eran días viscosos. De alambre. De crestas. De ruido, mucho ruido. De guitarras sucias. De música en los garajes.

El tal Jon Spencer toca en grupos de sótano. Underground se dice. Downtown se llama.

Cristina Martínez es ya una joven viajada y bruseleada. Forma parte del engranaje salvaje de la ciudad.

De la misma forma que la dulce Juanita Smith seduce con su tragedia pacense al teniente inglés Smith y acaba dando su nombre a una ciudad en Sudáfrica, o Elvira Quintana ahoga las penas de la guerra en Montijo cantándole al amor en tierras mejicanas, Cristina Martínez y Jon Spencer comienzan una aventura comunal que ya forma parte de la memoria más oscura del rock global.

Pussy Galore, Honeymoon Killers o Boss Hog forman parte de un esotérico círculo para iniciados en eso que algunos denominan el Trash Rock neoyorkino.

Volvemos a hablar de las guitarras sucias, casi destempladas, de los mensajes disconformes, de la esencia punk, en suma.

Son muchas las etiquetas que los críticos aplican a esta forma de hacer canciones, a este estilo de ver la vida. Garaje. Blues Punk. Rock Alternativo. Rock esquizoide.

Sea como fuera nuestra Cristina se convirtió en un icono de los bajos fondos musicales neoyorkinos, y por extensión, europeos.

Su imágenes desnudas en las carátulas de los discos, o en los conciertos vestida de látex la hicieron protagonista de muchos sueños de cuero y electricidad radiante.

Cuenta la leyenda que, sin embargo, volvió a Campanario para casarse de blanco y por la iglesia, como Dios manda, con Jon Spencer. ¿Alguien guarda fotos de ese día?

Obviamente, puedes adentrarte en Cristina Martínez y su música en las ventanas abiertas al mundo del proyecto Cantarrania. Ahí lo tienes todo.

El Arroyo de los Cagaos

A principios de los 90, la Taberna de Maxi (antes Ca'Belloto) en Villanueva la Vera era el reducto de los más escandalosos pelanas adolecentes del pueblo. Allí se reunían para beber calimocho, fumar porros y cantar canciones de la maqueta de Extremoduro que habían logrado nadie sabe cómo. Con el paso del tiempo estos pelanas fueron creciendo y descubrieron las virtudes del vino de pitarra, vedado para los vándalos sin iniciar que eran antes. En estos momentos, cuando los vapores del vino nublaban su conocimiento, cantaban entre el repertorio jevi, cierta canción verata en la que se apologiza la masturbación, con lo que poco a poco fueron dirigiendo su esfuerzo hacia la recopilación de canciones de taberna con las coplas lo más guarras y escandalosas posibles y que más tarde harían famoso al Arroyo. Algunos, incluso se arrimaban a las numerosas rondas que con motivo de bodas u otros festejos pasaban por la puerta de tan entrañable taberna, refugio último para aquellos que en estos singulares eventos querían escaquearse de tener que pisar suelo sagrado. En esta época, y hay documentos gráficos que así lo corroboran, celebraban los cumpleaños aporreando la guitarra y verreando en lo que llamaban liar una zambra, descubriendo el inmmeso placer de revolcarse en el suelo cuan mulos sudados duchándose en la arena.


Y llegó el día en que cerró sus puertas la ya legendaria taberna de Maxi, pues se jubilaba el tabernero incapaz de soportar más los intensos hedores marihuaneros que emanaban de su lugar de trabajo. Tras echarle a tío Maxi una despedida que estuviera a la altura de las circunstancias, en la que casi mueren electrocutados, anduvieron errantes sin bar fijo hasta que Merengue les ofreció su paciencia mañanera, quedando desde entonces su taberna establecida como sede oficial de estos singulares personajes. Tras un intento de formar un grupo de thrash metal que al fin y al cabo les sirvió para iniciarse en la música, fueron descubriendo que era más divertido tocar por bares y tabernas que en local de ensayo. Así pues, los derroteros de estos pelanas no transcurrirían más por el mundo de los electroduendes, y las guitarras eléctircas empezaron a oxidarse y cojer polvo abandonadas en el local, mientras que la vieja guitarrilla no paraba de romper cuerdas y dedos por igual. Además, poco a poco se fueron uno a uno cortando el pelo según fueron siendo llamados a filas, con lo que los exentos, los objetores y los insumisos son los únicos de este grupo que siguen teniendo el pelo largo (es decir, el exento, el objetor y el insumiso).

Gracias al legendario Peporro, a José María y otros aguitarreros, a la sombra de la encina del Labrao el Señor y a la santa paciencia de Merengue , algunos de estos Calaveras (como se conocía por esta época a los antiguos pelanas que seguían con la afición a las camisetas románticas) aprendieron de mala manera a afinar guitarras, laudes, bandurrias, arabeles y lo que hicera falta. Con los guitaparros afinados descubrieron un maravilloso mundo de armonías tradicionales que antes les parecía provenir del vapor mágico del pitarra marihuanero. Así pudieron comprobar que si en vez de gritar a lo burro y aporrear la guitarra ponían ciertos acordes en un orden determinado y se entonaba una tosca medolía en conjunción resultaba una bella canción, incluso podía salir una jota o una rondeña. Descubrieron además que existían varios estilos para cada cantaor y pueblo y, en general, un universo entero de melodías y ritmos por explorar. Y eso les pareció bueno.

Así, cuando cerraban la discoteca, en vez de dedicarse a berrear como antes, corrían a sus casas a por los guitarros, los afinaban a duras penas y practicaban horas y horas, amenzando las tranquilas mañanas domingueras de Villanueva. Lo hicieron con tanto entusiasmo que los propios pelanas que no sabían tocar ningún instrumento aprendieron a hacerlo para no dormirse, pues su fama de juerguistas infatigables se estaba echando a perder. En esta época empezaron a manifestarse los talentos hasta entonces ocultos de algunos de estos vándalos que parecía que sólo sabían dedicarse a hacer el indio. También se reforzó el grupo con una nueva camada de jevis sin domar que también habían evolucionado desde lo más cañero del Hardcore hasta la música tradicional.

Debido a un cúmulo de casualidades de la vida, en la radio del tractor que escuchaban colgando tabaco un día escucharon que existía un concurso de jotas y rondeñas al que decidieron presentarse, dispuestos a cagarse en Dios como usualmente hacían. Desde entonces los pilares que el deleznable caudillo había eregido para tratar de domesticar la música tradicional empezaron a derrumbarse. Corría el año 1996, El Arroyo los Cagaos empezaba su actividad guerrillera.


FUENTE:
arroyodeloscagaos.com

Perroflauta

Este proyecto musical surge de la colaboración de los músicos Markos Bayón y C'sar - inn (ex -Bajos Instintos y Sister Jane) con Gecko Turner (The Animal Crackers, The Reverendos) en un intento de dar rienda suelta a una serie de inquietudes musicales que no contemplaban en otras formaciones que han integrado previamente.

A Finales del verano del 96, graban sus primeras composiciones en común, que darán lugar a un paquete de canciones denominado "Cuba #28 Exp." (nombre que toman del domicilio de Markos y Gecko donde fueron compuestas y grabadas). Temas "The girl next door", (el espíritu de la chica de Ipanema del año 2000), o el mismo "Perro Flauta" demuestran tener una gran aceptación cuando son tocados en directo. Unos meses despúes hacen su primera aparción juntos (Gecko Turner, Markos Bayón y C´sar Inn) en público con motivo de un festival a beneficio de Rwanda y Zaire, bajo el nombre de Reverendo Turner y Sección Kómika Percutiva.

El grupo queda redondeado con la incorporación de Alvaro "Dr.Robelto" Fernandes, uno de los músicos de mayor calidad y experiencia de nuestro ámbito, que encaja como anillo al dedo dentro de este proyecto musical y del gran trompetista brasileiro Irapoan Freire. Su repertorio se compone de canciones popias, en las que fusionan ritmos y melodías étnicas con ciertas dosis de música occidental. También incluyen versiones de temas reagee, música africana, etc...

Con la edición de su primer trabajo en CD (maxisingle de cinco canciones en el que cuentan con el músico cubano Luis Barbería), coincidiendo con su actuación en el Festival de Músicas del Mundo WOMAD´97, se revelaron como una de las formaciones más interesantes y originales del panorama musical actual. Sus actuaciones en directo (según podemos observar entre sus adeptos), evidencian que estamos ante un fenómeno que trasciende lo puramente musical para convertirse en "algo mas", porque ¡"Perroflá" también eres tú"!.

La llegada de su segundo trabajo, "PERROFLAUTA", resulta sorprendente, tanto por la cantidad como por la calidad de las colaboraciones (Ruben Dantas, Kepa Junkera, Luis Pastor, Antonio Toledo, etc...) con las que cuentan. Además la banda se amplia al incorporar a dos nuevos miembros: Edu Nascemento (guitarras) y Rodney D´Assis (percusiones). Ocho nuevas canciones, un re-mix de "The girl next door" y los temas del anterior mini C.D. conforman los trece temas que incluye este magnífico álbum.

FUENTE:
indyrock.es


Toda la música de Perroflauta en Cantarrana Corps.

Masegosa

1978. Creo que era ese año. Cáceres. Aldea Moret. Campo de fútbol de las minas. Macroconcierto. La cabeza de cartel era Ñu y su flautista loco J.C. Molina. Algún grupo local, y algún otro grupo regional.

Estábamos allí tragando tierra y polvo. Moviendo la cabeza como si tuviéramos melenas jevimetaleras. Ni teníamos el pelo largo ni chupa de cuero, pero tocábamos la guitarra en una buhardilla de Antonio Hurtado, y conocíamos a algunos de los músicos que iban a actuar esa noche, y Ñu estaba en todo su esplendor. No había macroconcierto que se preciara que no anduvieran por allí los Jethro Tull del Manzanares. Era como una cantinela, como la alineación de la selección de Brasil, o la del Sporting de Lisboa, porque ya por aquellos entonces empezó uno a tontear con lo portugués. Leño, Asfalto, Topo, Ñu, Coz, Obús, Barón Rojo, Storm, Cucharada y así hasta llegar al delantero centro, a Union Pacific, la casa madre de todas las Vallekas.

No se había inventado el botellón, pero ya existían las litronas, aunque uno ha sido de toda la vida más de cocacola a porrillo, y había en uno de los fondos del campo una barra o algo así.

Se apagan las luces. Suenan guitarras y aparece un tipo con planta de macarra que sujeta entre las manos algo parecido a un palitroque. No. No era un macarra ni se trataba de un palitroque. Era Carlinos Masegosa y una baqueta de batería. Era Hecatombe.

No recuerdo muy bien el resultado de aquel festival en aquel infame campo de fútbol. Sólo queda en la memoria la imagen de Carlinos con la baqueta y el rock cañero de Hecatombe.

Pregunté. Eran de Mérida. Joder con esta gente. Parecen profesionales. Pasaron los años. Pasaron más años todavía. De los escombros de Hecatombre nació un río de guitarras afiladas en las tranquilas aguas emeritenses. Albarregas. Y en ese río, siempre flotando, la baqueta de Masegosa. Más de una vez vimos a los Albarregas. En Montijo, quizás, en Badajoz, en Cáceres. Se recitaba, por lo bajini, una pequeña alineación. Y no era la que capitaneaba Leño. Era como más de aquí. Como de fútbol sala. Albarregas. Tentación. Palpitación. Y Acción Rock Band, que eran como de otra época.

Luego uno empezó a frecuentar Mérida y llegó a Bucéfalo y al Carlinos que cabalgaba a lomos del caballo mitológico.

2008. Han pasado 30 años. Uno sigue sin melena, pero sí con chupa de cuero, que se la compró hace algún tiempo, y sus buenos talegos que le costó. Mérida. Acueducto romano. Bucéfalo celebra sus 25 takos. Se dice pronto. Ahí estaba Carlinos. En algún momento cogió la baqueta y uno volvió al viejo campo de las minas. Pero no. No estaba en Cáceres. Estaba junto al río que le dio vida a Masegosa. Porque uno piensa que a estas alturas Mérida no se puede dibujar en un plano sin el otro río, el Albarregas, y sin caballos correteando por el viejo Circo Romano del Rock mordiendo el polvo del gran Bucéfalo.

Porque Carlos Masegosa es parte de la memoria sentimental de los últimos emeritenses. Y lo que le queda.

Rades
Septiembre de 2008


FUENTE: farwexttext

Bucéfalo

Tras la disolución de grupos como Albarregas o Hecatombe, algunos componentes de dichas bandas deciden unirse para formar, a principios de 1982, Bucéfalo. El nombre procede del mítico e incansable caballo que, según se dice, sirvió de montura a Alejandro Magno, ya que consideran que la música que hacen es tan "guerrera" como lo fue el animal.

Tras dos años de componer y preparar un repertorio completo, hacen su debut en la Sala Trajano de Mérida, el 13 de abril de 1985, resultando un auténtico éxito de público y crítica por igual; y siendo posteriormente avalada su trayectoria profesional al colaborar con miembros de diversas bandas españolas, principalmente extremeñas, como Ama, Aviones, Bajos Instintos, Blackbird, Inlavables, Sínkope y Perroflauta, por citar algunas. También han compartido escena con Barón Rojo y Rosendo.

La letra de las canciones suelen ser escritas por el vocalista, que se basa en anécdotas que les llaman la atención; siendo, por lo general, y siguiendo la costumbre del rock español, situaciones cotidianas y de la calle. En sus propias palabras, "no nos metemos con nadie, pero nos metemos con todo el mundo".

El título de su segundo disco, Fuera de aquí, tiene un doble sentido: por una parte, reafirmar la procedencia emeritense (de aquí) del grupo, y por otra, ser "profeta de nuestra tierra" fuera de ella.
De un modo similar, su último disco (Nusotrus palramus asina) pretende ser una reivindicación del habla extremeña al tiempo que un homenaje al pueblo extremeño, y en especial a Luis Chamizo -en cuya obra se basa al adaptar a canciones varios de sus poemas publicados en El miajón de los castúos, libro que "Carlinos" afirma haber leído noventa y siete veces.

Tras tomarse un descanso (separarse el grupo), sus miembros echan a andar por caminos separados: formando nuevas bandas de rock (Caña de lomo), jazz (Jazz four sale), preparando encargos para publicidad en emisoras de radio...
Pese a todo, los miembros del grupo seguían manteniendo estrechos lazos de amistad y, finalmente, el 25 de septiembre de 1999 (cumpleaños del cantante, J. Carlos) deciden unirse de nuevo tras diez años de espera. Tras una discusión sobre el nombre de la banda y género musical a seguir, se decantan por mantenerse como antaño, en cuanto a nombre y estilo, no queriendo olvidar sus raíces ochenteras. Anunciado (y celebrado) su regreso en diversos medios de radio (SER, COPE, Onda Cero, RNE ...), prensa (El Periódico Extremadura, Hoy ...) y televisión, Bucéfalo fue el grupo encargado de clausurar el festival WOMAD del año 2000 celebrado en Cáceres.

En el 2004 entra Javier Montero a la batería sustituyendo a J. Mora.

A mediados de Febrero de 2005 entran de nuevo a grabar su tercer trabajo “NUSOTROS PALRAMOS ASINA ” un homenaje al Miajón de los Castúos del poeta Luis Chamizo. E este se presenta el la Sala DT de Mérida ante mas de 1000 personas y con la colaboración de todos los músicos que participan en dicho CD. Coro Adlibitum.( Susana, Bangla Desh). (Markos, Combo, Bebe). Manu Herrera. Wudy. (Nono, Manjerico).Blas Barroso. (Jesús, 4 Gatos). Mariano Fernández. Armando Mazuecos.(Jesús, Nandy, Alberto, Cría cuervos). Luis Cotallo, Raúl Jiménez (El Gitano la cabra....) Alberto (Sínkope). En noviembre de 2006 entra como nuevo componente de la banda Blas Barroso al violin electrico.

(...)


En Mayo de 2008, sale a la venta el cuarto trabajo de Bucéfalo, "25 TAKOS" . Un doble CD, en formato Digipack, el primero con 8 temas nuevos y el segundo, 14 temas, que es una recopilación de todos los discos de la banda. UNA JOYA, en recompensa a su 25 aniversario. Indagamos y fusionamos distintas culturas histórico- musicales, homenajeando el talento de dos poetas extremeños que escribían de una manera muy particular: el castúo. Y describen una honda manera del sentir extremeño. Estos dos poetas, J.M. GABRIEL Y GALÁN y LUIS CHAMIZO, llamaron nuestra atención y decidimos convertirnos en los rapsodas modernos de las poesías de estos dos paisanos; y hemos hecho posible la descabellada idea de fundir el rock y el habla en castúo de esos textos llenos de vitalidad. “ROCKASTÚO”. Este nuevo trabajo esta grabado y producido por PROMUSICA. En el disco colabora Óscar Sancho, del grupo LUJURIA y el gran saxofonista DAVE LERMAN, del grupo LOS NIÑOS DE LOS OJOS ROJOS. Así pues la suerte esta echada y se llama BUCÉFALO


FUENTE:
wikipedia


Liga de la Ciencia Pagana

La Liga de la Ciencia Pagana es un proyecto puesto en marcha por Pizarro (trasunto electrónico del compositor extremeño Radess) y el bajista, ex A Palo Seco, Leandro Alonso.

Y se trata sin duda de un proyecto de militancia. De militancia combativa frente a los fundamentalismos, las mojigaterías, la arrogancia y la intransigencia.

Recoge en su fondo de armario postulados y estéticas que vienen del punk más nihilista, del universo libertario, de la poesía simbolista, los heterodoxos y las misiones pedagógicas, las pinturas rupestres y Microsoft, el Corto Maltés y Patti Smith.


Al tiempo la Liga de la Ciencia Pagana navega entre la performance, el arte de acción, las intervenciones y las guitarras afiladas, con propuestas de pequeño formato y breve, pero intenso metraje.

Con un minutaje que no excede en general los 20-25 minutos, las propuestas de la Liga de la Ciencia Pagana pretenden ser disparos, puñetazos en el bajo vientre, latigazos a la conciencia, y para ello la Liga no duda en hacer uso de la alta tecnología, el software y los mandos a distancia.



Desde su nacimiento en 2005, la Liga de la Ciencia Pagana ha tenido la ocasión de mostrar sus dientes en algunos de los festivales más relevantes de Extremadura como el Festival de Mérida (2006 y 2007), el Festival de Teatro y Danza Contemporáneos de Badajoz (2006), el Festival Maquinarte (2006), o el Festival de Teatro en la Calle de Villanueva (2007), así como eventos que han trascendido los ecos nacionales, como su presentación en las fuentes del Palacio Real de Madrid con motivo de La Noche en Blanco (2006).


FUENTE:
ligadelacienciapagana