Castelo Branco es una pequeña ciudad de la Beira Baja que vive de lo que da la tierra: olivos, queso y miel, además de sus codiciadas colchas de lino bordadas en seda. Tiene el atractivo de su urbanismo medieval, además de un puñado de edificios manuelinos, como la catedral y el calvario. El antiguo palacio episcopal, hoy convertido en museo, se rodeó de un jardín para el asueto del prelado, cuestión que, a juzgar por su lujo y exuberancia, cumplía sobradamente. Se distribuye de forma escalonada en distintos planos a los que se accede por medio de una pomposa escalinata de mármol flanqueada de estatuas que reproducen los apóstoles y los reyes de Portugal. Muestra un elaborado trabajo de cantería en fuentes, bancos y balaustradas, y es todo curvas y meandros barrocos juguetones, con murales de azulejos y setos de boj de formas arquitectónicas. El agua es aquí un elemento tan importante como la vegetación, como se aprecia en el estanque de las Coronas o el Lago Grande, las albercas repletas de helechos, nenúfares y papiros, las cascadas y las fuentes cantarinas que surgen en cada esquina.
INÉS ELÉXPURU - 08/02/2002
FUENTE: elpais.com
INÉS ELÉXPURU - 08/02/2002
FUENTE: elpais.com
................

D.Vicente Ferrer da Rocha, segundo Obispo de Castelo Branco, acrecentó y arregló los jardines en 1782. Hay muchísimas estatuas de granito con un gran simbolismo. Las cuatro partes del mundo conocidas en esta epoca (Europa, Asia, Africa, India); los signos del Zodiaco; los ciclos de las estaciones y de los meses del año; el aire y fuego, basis del universo en la concepción griega; la Muerte, el Juicio, el Infierno y el Paraíso; las Virtudes (Esperanza, Caridade, Fe, Fortaleza, Justicia…), todo se funde, acordando cuan pasajera es la vida y el caracter contemplativo del jardin.
El gran lago, con la catarata encima, con representaciones de Moises y de Santa Ana y de la Samaritana, nos alerta para la presencia de un otro elemento del Universo: el agua. De esa plataforma se accede a una otra localizada en un plan inferior, con las escaleras de los Apostolos alrededor, con toda la simbologia de la vida o de la muerte, y de los Reyes, de D. Afonso Henriques hasta D.José
El gran lago, con la catarata encima, con representaciones de Moises y de Santa Ana y de la Samaritana, nos alerta para la presencia de un otro elemento del Universo: el agua. De esa plataforma se accede a una otra localizada en un plan inferior, con las escaleras de los Apostolos alrededor, con toda la simbologia de la vida o de la muerte, y de los Reyes, de D. Afonso Henriques hasta D.José
FUENTE: cm-castelobranco.pt